Todo pareciera indicar que el único freno para el desarrollo y crecimiento de esta industria en Uruguay y Latinoamérica son los recursos humanos calificados disponibles para acompañar una industria que no sólo está en constante crecimiento, sino que pide profesionales con competencias específicas como rapidez en la adquisición de nuevos conocimientos, fuerte adaptación a instancias de cambio y por supuesto, idiomas.
“Uruguay está en una situación de pleno empleo en distintos sectores y sobre todo en aquellos vinculados a servicios, donde la rotación es enorme, particularmente en software, como programadores y demás. A pesar de ello, todavía se pueden ofrecer RRHH de calidad a precios competitivos y prueba de eso es la presencia creciente de inversiones extranjeras”, comenta Pablo García, Economista líder en Comercio e Inversiones del BID.
Javier Peña, Jefe de Comercio Internacional de la Cámara de Comercio, asegura que si bien en la mayoría de los casos las empresas que se instalan en territorio nacional no demandan grandes cantidades de profesionales, a veces les cuesta llegar incluso a esas cifras. "Supongamos que una empresa necesita 35 doctores en Matemática, que debe haberlos. Ahora, lo complicado es que quieran venir a trabajar a esa empresa, cuenten con las soft skills necesarias y tengan un manejo fluido de inglés. En Uruguay, la cantidad de profesionales es muy reducida, es entonces que la educación adquiere una importancia enorme”.
“Nos interesa sensibilizar tanto a las empresas como a los jóvenes, que son la razón principal por la que un inversor va a venir a Uruguay, dejándoles claro que pueden crecer a través de la industria de servicios globales que equipa muy bien a sus personas y les da la oportunidad de ver el mundo sin necesariamente salir de Uruguay”, destaca Mario Tucci, Socio fundador de MVD Consulting. “Esta industria es muy sana desde todo punto de vista: no contamina, paga bien y no hay lugar para el atropello, porque se maneja con reglas globales, que generalmente son buenas y cuentan con respaldo en tribunales internacionales”.
El coordinador general del Programa Servicios Globales (Uruguay XXI - BID), Alejandro Ferrari, destaca que la industria de los servicios globales genera múltiples oportunidades para quienes deciden avanzar en su formación técnica o universitaria. “Hoy desde Uruguay, por ejemplo, se desarrolla software de clase mundial, se coordinan movimientos y transacciones de mercaderías entre puntos remotos, se administran negocios situados a lo largo de las Américas o se conducen procesos de investigación y desarrollo en cooperación con centros de primer orden mundial. Para estas actividades, las compañías internacionales tienen remuneraciones superiores al promedio del mercado y permiten acceder a prácticas y conocimientos que potencian el desarrollo profesional”.
Este texto fue publicado en la nota "Servicios Globales de Uruguay al Mundo" publicada en la edición especial de PRO Universitarios. Accedé a la revista completa haciendo clic aquí.