Para trabajar en empresas de tecnología hoy no significa que debas ser un experto en tecnología.
Las compañías están empezando a demandar roles y oficios que tal vez no necesitaban hace algunos años atrás. Y la pandemia ha hecho un verdadero empuje a la demanda de esos roles porque los productos y servicios digitales atraviesan nuestras vidas. La Cámara Uruguaya de Tecnologías de la Información (CUTI) está al tanto de esta tendencia. Leonardo Loureiro, su presidente, dijo a Cromo que se pueden ver expertos en diferentes ramos. Sociólogos, psicólogos, comunicadores, economistas, contadores participan en la producción tecnológica.
“Cada vez más las empresas son de base tecnológica”, aclaró, y aventuró que en un futuro esta necesidad que hoy tienen formará parte de su ADN. El Observatorio de la CUTI, que releva el estado de situación del sector cada tres meses, señaló en su último informe que el 9% de las empresas prevé contratar a futuro a “especialistas no TI”. Un documento elaborado por ese mismo observatorio analizó la formación académica que hubo en 2021 y fue elocuente en su conclusión final sobre este aspecto: “(El sector TI ha presentado en las últimas décadas un sustancial crecimiento y ha demostrado contribuir a la generación de empleos calificados tanto de expertise en tecnologías de la información como de diversas formaciones”.
Cuáles son las disciplinas
Una de las más escuchadas es todo lo que engloba UX (user experience en ingles, experiencia de usuario en español). El concepto que engloba a esta a disciplina es cómo lograr una mejor experiencia antes, durante y después de entrar en contacto con una aplicación o un sitio web. “Hay sociólogos y psicólogos que estudian el comportamiento de los usuarios”, comentó Loureiro.
En Mercado Libre está integrado por un equipo que analiza la navegabilidad, el diseño, las funcionalidades, la diagramación y hasta la paleta de colores, dijeron desde la compañía. En Pedidos Ya, en tanto, “conviven profesionales de las carreras de diseño, comunicación, periodismo, psicología, publicidad, antropología o marketing, inclusive varias veces son autodidactas”, indicaron a Cromo desde la compañía. Dentro de los que se desempeñan en el mundo “UX” hay diferentes roles. Uno de los más nombrados es el UX Designer (Diseñador de la Experiencia de Usuario). Se dedican a crear interfaces que satisfagan las necesidades de sus clientes y proporcionen una experiencia intuitiva y amigable.
Y dentro de este mundo hay uno que es mucho más específico y está generando mucho empleo. Es el UX Writing. Este rol está más orientado a comunicadores. Se puede decir que es la persona encargada de diseñar conversaciones e interacciones entre el usuario y una plataforma digital a través de las palabras. Agustín Herrero, periodista de formación y UX Writer por elección, encontró un mundo fascinante. Se topó con el nombre de este cargo en LinkedIn cuando PedidosYa estaba buscando personas con este cargo. “Ahí dije: ¿qué será esto? El nombre writer en inglés me llamó la atención y dije: ‘Tal vez puedo encajar’. En internet hay un montón de blogs y de cursos y descubrí que me encantó”, dijo. Lo que hace Agustín en definitiva es guiar a los usuarios, a través de un lenguaje claro, conciso y útil, a cumplir sus objetivos y satisfacer sus necesidades. Y así trabajó en PedidosYa y próximamente lo hará en Mercado Libre.
Su rol es clave para llegar al público final. Para entenderlo más claro: cuando un usuario pone una contraseña incorrecta para ingresar a su servicio de correo electrónico no es lo mismo que le diga “Error” a que le diga “Contraseña incorrecta, intente nuevamente o restablézcala”. La diferencia entre una y otra opción puede cambiar muchísimo la experiencia de usuario y puede decidir a una persona a buscar otro servicio de e-mail. Llevado al mundo del comercio electrónico una palabra puede modificar la decisión de compra de un usuario sobre un producto. “Hoy la tecnología le ha dado un lugar a muchas personas con perfiles muy distintos con poco conocimiento con la programación en sí”, comentó Herrero.
La ciencia de datos, el otro fenómeno
“La ciencia de datos es una forma de análisis estadístico que busca predecir. Mediante aprendizaje automático o algoritmos”, comentó a Cromo Natalia Castro, quien integra un programa de Data Science en Uruguay. La Universidad de Montevideo, que leyó el fenómeno y lanzó una licenciatura específica sobre esto, lo resume como “análisis de grandes volúmenes de datos a través de la combinación de fuertes conocimientos matemáticos, estadísticos, tecnológicos y gerenciales”. Las grandes compañías tecnológicas cada vez incorporan más este rol. Por ejemplo, Mercado Libre tiene a estos expertos que saben diseñan, entrenar y evaluar modelos “capaces de adaptarse a entornos productivos complejos, eficientes y automatizados”.
Una de las cosas que realizan estos científicos de datos es en la prevención de fraude. Quanam, una empresa de software uruguayo, explica en su web cómo una persona que ocupa este rol puede ayudar a esta actividad. “implica la creación de modelos” que pueden automatizar la detección de estos engaños. Quienes trabajan en esta área aportan información de cómo se sus productos, con datos que les permiten medir y evaluar la experiencia de usuarios.
Herramientas “no code” o “low code”
Gastón Milano, chief technology officer de Genexus, explicó que la compañía uruguaya ofrece herramientas “low code” que busca acercar las herramientas de software a personas que no están tan formadas en el rubro de la programación. Parece haber lugar para todos. Y el ejemplo que demuestra que se necesitan de distintas disciplinas es Coronavirus UY, la aplicación que se hizo en tiempo récord durante la pandemia y que ayudó a monitorear un fenómeno de salud que afectó a la sociedad hace dos años. “En vez de estar un programador haciendo un flujo de cómo funciona la vacunación del coronavirus, lo puede hacer un epidemiólogo”, comentó. Y las herramientas que provee Genexus para impulsarlo le permite hacerlo sin entender tanto de programación.
¿Dónde aprenderlos?
Las grandes plataformas de cursos permiten estudiar en internet, y a tu ritmo, todas estas disciplinas. Domestika, Coderhouse, Crehana, Coursera, Udemy, Digital House tienen múltiples oportunidades para aprenderlos. En Uruguay hay quienes ofrecen formación en este sentido. La escuela A+, Carne y algunos cursos técnicos que tiene la ORT permiten aprender sobre actividades cada vez más demandadas en el plano laboral. La Universidad Tecnológica, en tanto, posee una Maestría Profesional en Ciencia de Datos, que cuenta con el soporte del Massachusetts Institute of Technology.
Fuente: El Observador